TRAZOS DE LUZ



Un grupo de estudiantes de la Universidad Intercultural de Chiapas (UNICH) literalmente tomó una esquina de la Plaza de la Resistencia el día 16 de mayo para exponer sus trabajos fotográficos. Este es sólo uno de tantos pequeños espacios para difundir el arte porque piensan que su trabajo -en este caso la fotografía- debe tener un sentido más allá de obtener una calificación.
Por eso la necesidad de hacer una exposición que fuera más próxima a la gente. Se trata de intervenir la ciudad, tomar los  espacios públicos, tal como se hizo el pasado 7 de mayo, cuando se llenó de gente hasta la madre de tanta violencia.
“Trazos de Luz”, nace de la convicción de que la fotografía es un arte en el que se dibuja y escribe con la luz, nos cuenta Coni, una de las organizadoras de la exposición. “Reconocemos que todavía no somos unos grandes escritores de luz, pero hemos comenzado a hacer algunos trazos dignos que queremos compartir.”
A la exposición asisten personas de todos los géneros, edades, condición social, filiación política: están presentes amas de casa, niños, estudiantes, turistas, hippies, “auténticos coletos”, incluso los policías preventivos (“tan ocupados en este tiempo de violencia”) que se dan tiempo para disfrutar de la exposición.
Y es que a eso se exponen los artistas al sacar sus obras de las galerías llenas de snobismo, repletas de individualismo y atiborradas de soberbia: ahí, en las calles y en las plazas públicas, están a la vista de todos aquellos que generalmente son solamente objetos del arte pero que casi nunca son sujetos activos del goce estético (la  expresión más pura del arte que nadie sabe explicar pero al que doña María se refería sin pretensión: “Pues yo me gusta ver…”)
La exposición estará hasta el día 22 de mayo en la Plaza de la Resistencia. Invitamos al público en general a que asista a mirar los trabajos de los estudiantes y a los artistas a seguir el ejemplo y retomar los espacios públicos donde todos, independientemente de su poder adquisitivo, pueden admirar sus obras y gozar con ellas, en un acto de resistencia civil pacifica, como respuesta a la violencia de Estado y a la criminalización de los movimientos sociales.