LAS TRANZAS DEL TELETON


San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.

Amelia Cristina Noriero Escobar.

Desde hace doce años el monstruo de la desinformación Televisa, a través de su Fundación, se ha encargado de realizar distintas acciones de supuesta «asistencia social», como el programa de donación de computadoras, trasplantes de córneas y su proyecto más fuerte y redituable económicamente que ha encabezado su «altruismo» empresarial: TELETÓN.
Haciendo bombardeos de anuncios viscerales que explotan las discapacidades físicas de cientos de niños como si éstos fuesen objeto de exhibición, te hace sentir mal porque tú «no donas dinero a esos niños».

Dos días enteros de transmisión ininterrumpida por donde circulan «comunicadores», actores y actrices, cantantes, políticos, empresarios, Etc. que lloran a moco tendido «conmovidos» con los temas que al mero estilo de “Mujer casos de la vida real” (especialidad de la empresa), vuelven a mostrar y exhibir una y otra vez a manera lastimera a personas con alguna enfermedad o que en algún momento de su vida sufrieron un evento inesperado.

Todo para vender la idea de que con el dinero que se junte, se construirán hospitales y centros de rehabilitación en donde se atenderá a toda esa gente, que de hecho deben ser construidos por el Gobierno con el dinero que pagamos miles y miles de personas de impuestos.

Pero… si son tan buenos los señores dueños de Televisa, que idearon este mesiánico acto ¿por qué no hacen éstas obras de las «benéficas», sin pedirle un peso a la gente? Obvio, pues porque ¡no sería negocio para ellos!

El segundo párrafo de artículo 31 del Reglamento de la Ley del Impuesto sobre la Renta dice que «Asimismo, se considerarán deducibles los donativos que se otorguen a asociaciones, instituciones u organizaciones que destinen la totalidad de los donativos recibidos y, en su caso, sus rendimientos, para obras o servicios públicos que efectúen o deban efectuar la Federación, Estados, Distrito Federal o Municipios.»

E decir, cuando se hace una donación a una institución que otorgue, sin fines de lucro, un servicio que debe otorgar el Estado, la persona que realizó la donación puede decirle a hacienda que no le cobre los impuestos equivalentes a la cantidad que dio, pues ya hizo una «buena obra». El truco que utiliza Televisa es el siguiente:
Televisa, como cualquier empresa debe pagar impuestos, como su negocio es obtener más ganancias y menos pérdidas, el pagar no le conviene, así que crea una institución «aparte»:

Fundación Teletón, la cual se dedica a hacer hospitales y dar atención médica (obligación del Estado) cada año y antes de ser la fecha en que se pague a Hacienda, ésta fundación transmite (con patrocinio de su mamá Televisa) dos días enteros llamando a la gente para que done dinero a su «causa», y fija una cantidad como meta que se debe alcanzar.

La gente por actuar de buena fe, cae en la trampa, hacen coperacha y donan. No les dan recibo para que Hacienda les descuente de sus impuestos el donativo que hicieron, no lo hacen valer pues es un proceso largo y engorroso para ser sólo $10.00; o bien, donas un peso en los botes (en los que se depositan cantidades inciertas, nadie te asegura que todo el dinero recolectado se vaya a la «institución de asistencia» y no porque se quede con la gente que está en el metro boteando, sino que hacer las cuentas no se dice la cantidad real que se recolectó).
Al final del segundo día, resulta que el dinero que donaron cientos de personas supera la meta de que se había fijado al principio. Entonces es cuando lo que no se ve en Televisión se traduce en ganancias efectivas para Televisa: Lo que se juntó, Televisa las acumula y en lugar de entregar miles de donativos por cada persona a Fundación Teletón, hace UNA SÓLA APORTACIÓN A SU NOMBRE (TELEVISA), por ello la Fundación le expide un recibo deducible de impuestos (algo así como un cupón de descuento).
De ésta forma, al momento que Hacienda le cobra, la empresa muestra el Recibo del Teletón, por lo que la SHyCP ya no le cobra pues supuestamente lo pagó al hacer la donación; pero no sólo eso, como el recibo era mayor a la cantidad que la empresa debía paga, Hacienda deberá ¡REGRESARLE! el excedente en efectivo, mismos que Televisa NO regresará a las personas que realmente donaron ese dinero
¿Ven el negocio?, esa es la verdadera finalidad del Teletón, ser un medio para que Televisa evada impuestos, y los pague la gente que enajena diariamente con basura televisiva.
En realidad, el verdadero problema radica en que miles de personas colaboran con 20, 50 ó 100 pesos, los cuales también son deducibles de impuestos, aunque a la gente que dona estas cantidades no se le da comprobante para que los deduzca de sus impuestos personales. De esta forma, todo lo que se dona al Teletón, al redondeo es dinero que el gobierno deja de recibir por concepto de impuestos, y que se debían destinar a obras y servicios al pueblo, enriqueciendo más a los ya de por sí millonarios dueños de Televisa y a los empresarios que le hacen coro y obtienen publicidad gratuita y reconocimientos por su «altruismo», ¡Que pagan sus empleados y clientes!

Éste es un motivo por el que no alcanza el presupuesto para educación o salud, por mencionar algunos, misma razón por la que hay pocos mexicanos que ganan más de un millón de pesos por día y mexicanos (más de los que crees) que apenas sobreviven con menos de quince pesos al día o si bien nos va con un salario mínimo, que no alcanza para nada, claro y además pagando impuestos (que nos descuentan en automático o indirectamente).

Si no prestas atención a esto, va a seguir subiendo la gasolina, va a seguir devaluándose el peso ¿quién pagará estas “jaladitas” del Teletón, El famoso Redondeo y otros?; vas a morir en espera de una consulta médica, te va a secuestrar un policía, y todos los demás servicios públicos van a ser igual o más deficientes que ahora…

Y lo peor es que no es broma ¡Es más que lógico!